Revisión del monitor portátil para juegos Arzopa G1: valor de juego de 144 Hz

Jul 31, 2023

El juego Arzopa G1 funciona bien en los fundamentos, pero falla con un estuche/soporte mal concebido.

Chasis robusto de aleación de aluminio

Precios atractivos

Pantalla brillante con frecuencia de actualización de 144 Hz

Cubierta/soporte de pantalla desconcertante

Sin soporte de sincronización adaptativa

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Los monitores portátiles vienen en varios tamaños con conjuntos de características muy diferentes. Algunos modelos se adaptan al conjunto productivo con paneles OLED vívidos y otros con frecuencias de actualización hiperactivas, como el Nexigo NG17FGQ, que buscan los jugadores. Pero para aquellos que sólo quieren un monitor para ampliar su espacio de trabajo (y juego lateral) a un precio razonable, esta entrada de 15,6 pulgadas de Arzopa merece su atención.

El monitor portátil Arzopa G1 Game ofrece una resolución de 1080p, frecuencia de actualización de 144 Hz, conectividad HDMI y USB-C y parlantes integrados. Hace todo esto con un precio de lista de $189,99, que ya es bajo entre los monitores portátiles. Sin embargo, el monitor se vende actualmente por $149,99 en Amazon, y un cupón de descuento adicional de $20 lo lleva a $129,99. El precio es correcto, pero ¿está obteniendo suficiente valor por su inversión como para considerarlo entre los mejores monitores portátiles? Vamos a averiguar.

El G1 Game es un monitor portátil de 15,6 pulgadas que es mucho más liviano en comparación con algunos de sus pares. Esto se debe a su diseño, que carece de un soporte integrado o una base de E/S como el Asus ZenScreen MB16QHG. Sin embargo, este diseño optimizado significa que el juego G1 tiene algunas desventajas evidentes, que analizaré más adelante en esta sección.

En el lado positivo, el G1 Game da una buena primera impresión. En lugar del plástico habitual que prolifera en el segmento de monitores portátiles, el G1 Game está construido con una aleación de aluminio. Eso le da una sensación de primera calidad y el chasis tiene muy poca flexibilidad. La sensación general es un buen augurio para la durabilidad del G1 Game, especialmente para los viajeros frecuentes.

El diseño es bastante básico, con biseles delgados que rodean los lados y la parte superior de la pantalla. Debajo se encuentra un bisel más grande, con una delgada línea decorativa plateada que agrega un toque de interés visual. Debajo de la línea de acento está el logotipo de Arzopa.

Hay un conector para auriculares, un interruptor basculante de tres vías para el OSD y un botón de retroceso para el OSD en el lado derecho del monitor. El lado izquierdo alberga las entradas, que incluyen dos puertos USB-C y un puerto HDMI de tamaño completo.

Dado que el G1 Game no tiene una forma incorporada de sostener la pantalla, debes confiar en el estuche de piel sintética incluido, que también funciona como soporte. Y ahí es donde vienen los problemas. Si bien el estuche protege la pantalla al transportarlo, como soporte es horrible.

Debe girar la parte de la cubierta de la pantalla del estuche hacia atrás para que la parte superior se adhiera magnéticamente a la parte posterior del monitor. Luego, la mitad inferior se extiende ligeramente para sostener el monitor.

El problema es que este diseño sólo permite que el monitor se asiente en un ángulo fijo. Peor aún, los puntos de contacto entre el monitor y el área del estuche que toca su escritorio son tan superficiales que incluso el toque más ligero puede hacer que todo se caiga. Es una pena porque Arzopa tomó la decisión consciente de utilizar materiales de alta calidad para el monitor actual. Comprometer todo el esfuerzo con un estuche/soporte inestable y no ajustable es una gran decepción.

El G1 Game tiene un panel IPS 1080p de 15,6 pulgadas con una frecuencia de actualización de 144 Hz. Este último es una cifra relativamente elevada para un monitor portátil y hace honor al "Juego" de su nombre. Arzopa también cita una relación de contraste de 1.000:1 y un brillo máximo de 300 nits.

Nuestras pruebas instrumentadas mostraron que el G1 Game superó con creces la estimación del fabricante en cuanto a brillo, logrando un promedio de 357,2 nits en el modo Estándar (354,2 nits en el modo Juego). El panel IPS cubrió el 84,1 por ciento del espacio de color DCI-P3 y el 118,7 por ciento de sRGB. En este grupo, el G1 superó a todos los demás monitores portátiles para juegos en todos los ámbitos, incluida una ventaja considerable en brillo.

En cuanto a las frecuencias de actualización, el G1 Game está muy por encima del promedio de 60 Hz para monitores portátiles. Recientemente analizamos el Asus ZenScreen MB16QHG, que tiene un panel de 120 Hz. El G1 Game sube la apuesta con un panel de 144 Hz para jugadores en movimiento. A pesar del máximo de 144 Hz, el G1 Game no es compatible con Adaptive-Sync, lo que significa que la compatibilidad con Nvidia G-Sync y AMD FreeSync es inexistente.

Dado que se trata de un monitor de juegos, decidí ver cómo manejaba Overwatch 2. Conecté el monitor a un NUC Hades Canyon con un procesador Intel Core i7-8890G con gráficos AMD Radeon RX Vega M GH.

Con los ajustes preestablecidos de gráficos en Alto, rápidamente alcancé el límite de 144 Hz con una resolución de 1080p. Sin embargo, de vez en cuando noté algunos desgarros en el marco, lo cual es antiestético en el fragor del combate. También conecté el monitor al Nintendo Switch OLED de mi hijo (usando la base del Switch y HDMI) e hice algunas rondas de Mario Kart 8 Deluxe sin problemas.

El rendimiento de la productividad diaria en el monitor fue excelente. Mi carga de trabajo diaria estándar incluye varias ventanas de Microsoft Edge y Google Chrome, Microsoft Word, Microsoft Excel, Slack y un editor de fotografías. El monitor manejó todo fácilmente y la frecuencia de actualización amplificada de 144 Hz me permitió un desplazamiento más fluido en las aplicaciones, pero por lo demás era indistinguible de monitores menores.

En general, los colores del monitor se veían bien, pero no excelentes. Sin embargo, este es un monitor que se vende por menos de $200. Para el uso diario de productividad y para juegos, el G1 Game satisfará perfectamente sus necesidades. Sin embargo, si lo que le gusta es un trabajo en el que el color es fundamental, es posible que desee mirar algo como el ZenScreen MB16QHG o el Zion Pro.

El juego G1 utiliza un interruptor basculante de tres direcciones para evocar y navegar parcialmente a través de la visualización en pantalla (OSD). Empujar el interruptor hacia arriba o hacia abajo se traduce en el movimiento respectivo a través del sistema de menús. Al presionar el control, accederá al siguiente submenú y finalmente confirmará una elección de configuración. El botón Atrás separado lo llevará al menú anterior en el OSD. Al presionar el botón Atrás mientras no está en el OSD se mostrará la fuente de señal actualmente seleccionada.

El OSD es relativamente básico, con los controles habituales de brillo, contraste, temperatura de color y posición/tiempo de espera del OSD. También hay configuraciones para controlar el brillo máximo, la luz azul baja y el modo Eco. Además, la resolución actual y la frecuencia de actualización del monitor se muestran en la parte superior del OSD.

Como la mayoría de los parlantes de los monitores portátiles, los que se incluyen en el juego G1 son una ocurrencia tardía. Suenan peor que los parlantes de una computadora portátil, lo cual es malo. Hay distorsión cuando pasas el 80 por ciento del volumen y no hay base. Puse “Canela” de Santana y sonó como si la canción estuviera grabada en el baño de una gasolinera. Estaba vacío, sin vida y hueco.

Pero recuerde que la mayoría de la gente compra monitores portátiles para aumentar su productividad en lugar de escuchar música. Por lo tanto, considérelo una ventaja, aunque no agregue mucho al paquete completo.

El juego Arzopa G1 representa un valor notable para quienes buscan un monitor de juegos portátil. El chasis de aluminio parece duradero y la calidad de construcción es excelente. Además, el diseño delgado y liviano lo convierte en un fácil compañero de viaje.

Sin embargo, si bien el estuche incluido hace un buen trabajo protegiendo el panel IPS del G1 Game, no sirve como soporte. No se puede ajustar el ángulo del monitor cuando el soporte está en uso y no es muy resistente en esta posición. Esperamos más, dada la calidad del propio monitor. Y aunque la frecuencia de actualización de 144 Hz es buena en este espacio, la falta de compatibilidad con FreeSync/G-Sync es una gran decepción.

El juego G1 se vende por $189,99, pero ha estado a la venta por $149,99 durante el último mes en Amazon. Además de eso, un cupón instantáneo de $20 reduce el precio a $129,99. Esa es una gran ganga para un monitor portátil de 144 Hz, que nos ayuda a pasar por alto algunas de sus desventajas (como los parlantes de mala calidad).

Si quieres algo con mejor color y negros como la tinta, mira el InnoCN 15A1F. Sin embargo, el G1 Game es intocable como monitor de juegos portátil a este precio.

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Brandon Hill es editor senior de Tom's Hardware. Ha escrito sobre tecnología de PC y Mac desde finales de la década de 1990 con firmas en AnandTech, DailyTech y Hot Hardware. Cuando no está consumiendo grandes cantidades de noticias tecnológicas, se le puede encontrar disfrutando de las montañas de Carolina del Norte o de la playa con su esposa y sus dos hijos.

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